sábado, 1 de febrero de 2014

LA CIGARRA Y LA HORMIGA DE LA FONTAINE.

 Podéis leer la fábula original de La Fontaine.

Llegado ya el invierno riguroso
la cigarra (que el tiempo caluroso
del estío pasó sólo cantando),
se halló desproveída
de lo preciso a conservar la vida;
y al duro extremo su escasez llegando
de no tener de mosca o gusanillo,
ni aun siquiera el más leve pedacillo.
A casa de la hormiga,
su vecina y amiga,
fue a implorar para su hambre algún socorro,
y le rogó quisiese de su ahorro
algún grano prestarle
para su subsistencia
que juzgaba poder reintegrarle,
sin que mediase apremio ni violencia,
en la estación siguiente:
“Yo te ofrezco pagar puntualmente,
como soy animal -le dijo- antes
del agosto futuro,
el principal y el interés constantes”.
La hormiga (esto es seguro)
no gusta de prestar, y, el tal defecto
es en ella el menor. Conque, en efecto
preguntó a la cigarra: “¿Qué te hacías
en los tan largos y ardorosos días
de verano?”. “Cantaba,
a todo el que pasaba
sin excepción de hora”
“¿Cantabas? Está bien, pues baila ahora”.
                             
                                     Jean de La Fontaine.


 Podéis observar la original en francés.

http://guitarra.artepulsado.com/gifsyfo/imagenes/Grabados_LBM/La_Cigale/Lafontaine_texto_fr.png

PINCHA EN LA IMAGEN Y LA PODRÁS VER MEJOR.

A continuación podéis leer la fábula de La Fontaine, adaptada.  Existen diferentes versiones, aquí podréis comprobarlo.



Cantó la cigarra durante todo el verano, retozó y descansó, y se ufanó de su arte, y al llegar el invierno se encontró sin nada: ni una mosca, ni un gusano.
Fue entonces a llorar su hambre a la hormiga vecina, pidiéndole que le prestara de su grano hasta la llegada de la próxima estación.
-- Te pagaré la deuda con sus intereses; -- le dijo --antes de la cosecha, te doy mi palabra.
Mas la hormiga no es nada generosa, y este es su menor defecto. Y le preguntó a la cigarra:
-- ¿ Qué hacías tú cuando el tiempo era cálido y bello ?
-- Cantaba noche y día libremente -- respondió la despreocupada cigarra.
-- ¿ Conque cantabas ? ¡ Me gusta tu frescura ! Pues entonces ponte ahora a bailar, amiga mía.

MORALEJA: No pases tu tiempo dedicado sólo al placer. Trabaja, y guarda de tu cosecha para los momentos de escasez

Una vez, al llegar el invierno, una cigarra que estaba muerta de hambre se acercó a la puerta de un hormiguero pidiendo comida. A su pedido respondieron las hormigas, haciendo la siguiente pregunta:
-¿Por qué durante el verano no hiciste tu reserva de alimentos como lo hicimos nosotras?
La cigarra respondió:
- Estuve cantando alegremente todo el tiempo, y disfrutando el verano plenamente ¡Si hubiera sabido lo duro que es el invierno...!
Las hormigas le dijeron:
-Mientras nosotras trabajamos duro durante el verano para tener las provisiones y poder pasar el invierno, tú disfrutabas y perdías el tiempo. Así que ahora...¡sigue bailando!
Pero las hormigas sintieron pena por la situación y entendieron que la cigarra había aprendido la lección, entonces finalmente compartieron con ella su alimento.

Moraleja: Quien quiere pasar bien el invierno, mientras es joven debe aprovechar el tiempo.

 Os dejo varias imágenes de la fábula.




 http://blog.educastur.es/bibliojosebern/files/2011/05/dibujo.JPG

A continuación podéis ver unos vídeos sobre la fábula. 











Os dejo unas imágenes que podéis colorear sobre la fábula.

 

 


 

 



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